Fácil es morir, difícil es vivir

viernes, 5 de septiembre de 2014

Sentimientos y culpa...

Es probable que alguna otra alma gemela  lea esto....
Identifique en una pequeña parte de su vida que en algún
momento vibro al compás de este sentimiento.

Que luego el tiempo, inexorable, se encargó de borrar....

A fin de cuenta, son sentimientos nacidos del fondo del alma,
como termina un Domingo y comienza un Lunes. Que al trasponer
el umbral  del pensamiento que avasalla, dan una paz inmensa
una vez concluidos.

Sin sentido, sólo observo tu enigmática mirada. Sin arte, sólo
admiro tu sensual caminar y con mesura, sólo tratando de recordar
tu olor... Y de allí ese gran amor.

Casi  clandestinamente para guardar confidencias con que nos
tropezamos o en este caso,  la búsqueda en la vida entre lo furtivo
y el desliz  a la inspiración  más brillante y hermosa que me ha
ha vuelto la ilusión de escribir y la pasión de amar de nuevo.

Es nuestro secreto, auto impuesto pero apreciando cada segundo
a tu lado. En momentos expresiones de necesidad y en otros en el
plano de una escritura tersa que expresa en la sensibilidad humana
de tu compañía  por el espacio visible entre tres fronteras.

La del amor que coquetea con la mujer elegida, la del amor compartido
y la del amor que apunta a la divinidad.


sábado, 1 de febrero de 2014

Dolor

   Refugio temporal del alma fugitiva
que a veces queda tendida por
siempre del recuerdo.

   Colores grises y lánguidas nostalgias
que deja escapar su última fragancia
en historias que no volverán.

   Donde gira la razón y los delirios sin sentido.
   Tranquilo cuando el alma logra lo prometido.

   En los pasos va el cadáver y en el
alma el ataúd que vuela quien
no podrá morir.

   Gracias por ser en mi vida un
descanso de paz, amor y vida.

martes, 19 de noviembre de 2013

¿Querías un poema?

 
   Algún día te escibiré un poema que no mencione el aire pero si la noche,
un poema que omita los nombres de las flores y que no tenga espinas.
 
   Algún día te escribiré un poema que eluda el mar y que no mire a las estrellas.
 
   Algún día te escribiré un poema que se limite a pasar nuestras manos por
nuestros cuerpos y que vuelva a convertir en palabras nuestras miradas.
 
   Sin comparaciones, sin metáforas, algún día te escribiré un poema que huela
a ti.
 
   Un poema con tu acelerada respiración y con la mirada que desde el alma
fue para mi.
 
   Algún día...

sábado, 9 de noviembre de 2013

Y así estaba...

   Vivía tranquilo, no tenia necesidad de pensar en nadie,
no sufría por nada y mucho menos por alguien.

   Mi corazón latía lo que tenia que latir.

   Luego después de un tiempo, un día de Agosto. Saliste
con ese caminar tan peculiar por la puerta de ese centro
comercial y entraste por la puerta de mi Mercedes Benz,
sonriendo, algo nerviosa, oliendo rico, las manos te sudaban
frió, sencilla, con palabras de amor y con algo de sufrimiento.

   Nos miramos, tuvimos unos instantes observandonos,
reconociendonos, tu voz ronca y sensual con algo de quiebre
en algunas palabras.

   Te tendí mi mano, me diste la tuya.
   Sentí tu sudor y tu cuerpo temblando.

   Te abrace, nos abrazamos... Te tranquilice, dejaste de temblar,
sentiste lo que siempre me dijiste que querías sentir.

   Y así fue como ya estaba enamorado de ti.

domingo, 3 de noviembre de 2013

Que ganas

   Que ganas de volar sobre el viento, sobre el espacio tan inquieto, imaginando cortar el tiempo, soñando alcanzar y guardar cada momento.

   Que ganas de mirar en silencio tus ojos, salpicados de sentimientos, que parpadean no tan lejos.

   Que ganas de atrapar tu pensamiento.

   Que ganas de atraparte en mis manos, sin que corras, sin que sólo me quede mirando. Cuando el tiempo se niegue a esperarnos.

   Que ganas de enmudecer las palabras, de esperar que la despedida no sea fatal, que retrocedas y me vuelvas a mirar, que hoy no sea el final.

   Que ganas de ganar, ganas de sentir que no te vas, ganas de volver a amar, ganas de volver a empezar.


¡Vivir!

¿Sabes a donde van las palabras que no nos dijimos?

¿A donde va lo que queríamos hacer y no hicimos?

¿A donde va lo que no nos permitimos sentir?

Me hubiese gustado que lo que nos dijimos caiga en el olvido, pero lo que no nos dijimos se nos acumula en el cuerpo y nos llena el alma de gritos mudos.

Lo que no nos dijimos se transforma en insomnio, en dolor.

Lo que no nos dijimos se transforma en nostalgia, en destiempo.

Lo que no nos dijimos se transforma en debería, en deuda, en pendiente.

Las palabras que no nos dijimos se transforman en frustación y tristeza.

Lo que no nos dijimos no muere, nos mató...

¿Viviendo?

viernes, 11 de noviembre de 2011

Tiempo

Lunes, martes, miércoles o jueves.
Enero o Diciembre.
Inútiles palabras,
traicionero tiempo.

¿Qué hora es?

¿Qué día es?

¡El próximo año!

¡Absurda forma de vivir,
insistiendo dividirla y poco disfrutarla!