Al compás de la luna y del cielo
viajaba un te quiero escondido en el pecho.
Aire caliente de mar, brisa de alegre cantar
te escondes así porque aún no puedes volar
esperando un día más claro y el final.
Viaja sereno, caminante de paz y ternura,
que al final de la senda no hay cielo nublado.
Viaja sereno, en la luna y el cielo,
que el te quiero que duerme adentro en el pecho,
en un día cercano y al compás de la luna,
cambiará en un te amo.